domingo, 16 de diciembre de 2012

Luna nueva


"Los placeres violentos terminan en la violencia. Y tienen en su triunfo su propia muerte. Del mismo modo en el que se consumen el fuego y la pólvora". 
Con esta payasada empieza "La saga Crepúsculo: Luna Nueva". Claro ejemplo de que las próximas dos horas se ajustarán al concepto de "Si no puedes sorprender con brillanteces, desconcierta con gilipolleces". Empezamos.

La presión social me ha hecho tragarme esta maravilla del séptimo arte y sumergirme en el apasionantísimo triángulo amoroso Edward-Bella-Jacob. Dividiré este telefilme en tres partes:

-Bella y Edward rompen. Pues eso. Por el bien y la seguridad de Bella, Edward decide cortar con ella y se marcha de la ciudad. Bella sufre muchísimo.

-Bella se arrima a Jacob. Para pasar el mal trago, Bella empieza a quedar con Jacob, el cual está más fuerte que el vinagre y, para que a nadie se le olvide, va siempre sin camiseta. Parece que va a haber rollito ahí pero al final nada. Lo único reseñable en esta parte es que Jacob y sus vecinos son hombres lobo. Pero bueno, Bella ya está acostumbrada a estas cosas y no parece impresionarla lo más mínimo.

-Bella vuelve con Edward. Debido a un giro lamentable del guión. Bella va a Italia y se reencuentra con Edward. A Edward se le olvida que por su culpa Bella está en peligro así que retoman su amor. Aquí hay un conflicto de intereses amorosos. Bella lo soluciona con un vago: "Me gustas mucho, Jacob, pero me quedo con Edward". Lamentable.

Pensaréis: "vaya puta mierda de resumen. De algo más irá la película". Pues no. Esto es todo. De verdad, de corazón, es una película infame. Los personajes son pésimos ejemplos para la juventud que, en lugar de afrontar sus problemas, huyen de ellos de forma patética.
Bella es un despojo con cara de pala que no es capaz de afrontar nada en su vida. Llora, gime, grita y se acurruca en su cama. Pone en peligro su vida y la de los demás con acciones infantiles y no es capaz de actuar con ningún tipo de criterio. Mujeres del mundo, parece ser que sólo tenéis dos tipos de camino en vuestras vidas: Ser como Snooki de Jersey Shore o ser un cero a la izquierda como Bella. Dad las gracias a MTV.
Por otro lado Edward tampoco se luce mucho. Huye cual cobarde y la única solución a su pesar parece ser el suicidio. Otro buen ejemplo de lucha y autosuperación.
El único que tiene sangre en las venas es Jacob. Lucha por los suyos, protege a Bella un par de veces, arregla motos, va a todos los sitios corriendo, es capaz de reir (cosa que Bella y Edward no dominan del todo) y no actúa ni habla como un gilipollas. La pena es que no le rompa la cara a Edward y a Bella al final de la película, espero que sea en la próxima.

Lo mejor: Se nota que hay más pasta para efectos especiales y ya puedo decir que Edward sí que brilla cuando le da el sol.
Lo peor: Bella
Conclusión: Se revela que Edward tiene 109 años. ¿De verdad no es capaz de hacer nada mejor con su vida que repetir el instituto una y otra vez?

2 comentarios:

  1. Me meoooooo!

    Me encanta comprobar que el nivel de entradas no baja ni un ápice, sino todo lo contrario. Cuando le explique a alguien de qué va Mouth On Fire, les remitiré a esta crítica, amigo mío.

    Por cierto, gracias por verte estos ñordos por nosotros, nos quitas un peso de encima.

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  2. Me voy a dar una tregua (aunque sigo con vampiros) pero continuaré con estas maravillas del celuloide!

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